¡A las buenas universos y curios@s!
Por fin, después de unos dos años de intenso trabajo hemos llegado a la temida cifra de la reseña número 50 y yo no podría estar más orgullosa puesto que éste 2020 ha sido el año más fructífero para el blog. Cuando inicié el año, quise ser realista y ponerme una meta que pudiese cumplir y compaginar con mi vida personal y ésa meta fue leerme como mínimo quince libros a lo largo del 2020. Bueno, pues ya estamos a finales de noviembre y puedo decir que prácticamente estoy doblando dicha cantidad y no sabéis lo orgullosa que estoy de mi misma. Dicho esto y antes de comenzar con la reseña que hoy nos ocupa, me gustaría daros las gracias infinitas por vuestro apoyo, por leer mis reseñas y interesaros por todo lo que tengo que decir en ellas, sois increíbles.
La novela de la que os hablaré hoy ha estado unos dos años esperando a ser leída y esto tiene un buen motivo. Debo admitir que cuando me hice con ella, me hacía muchísima ilusión leerla porque tenía buenas reseñas (al menos, las que yo tuve oportunidad de leer eran mayormente positivas). Sin embargo, esto último fue cambiando conforme la novela se fue haciendo más y más conocida. Las malas reseñas empezaron a aflorar por los blogs literarios y mis ganas de leerlo fueron disminuyendo cada vez más... Hasta ahora claro, que me he dicho a mi misma: "Que sea lo que tenga que ser".
En éste libro nos encontramos ante una novela totalmente autoconclusiva, de unas 345 páginas en su interior, narrada al completo desde el punto de vista de Emma, la protagonista. Cabe destacar que la edición del libro es preciosa, en la que resalta muchísimo el color rosa sobre el gris (color el cuál por cierto, representa muchísimo al blog).
Emma es una chica de apenas diecisiete años que pese tener tan corta edad, no ha tenido una vida para nada fácil puesto que apenas siendo una niña, sus padres sufrieron un accidente de tráfico en el que ambos salieron muy mal parados; Su madre falleció trágicamente y su padre se quedó paralítico, postrado en una silla de ruedas y con problemas de habla. Desde ése entonces, nuestra protagonista vive con su tía y la pareja de ésta, dedicando los fines de semana a ir a visitar a su padre en la residencia en la que éste se encuentra ingresado. Pero después de todo, no debemos olvidar que Emma sigue siendo pues eso, una adolescente que también precisa de un tiempo para ella, para disfrutar, oxigenarse y evadirse de la realidad entre sus hobbys en los que se encuentran la lectura, su blog literario en el que publica sus propias reseñas, su canal de booktube y más tarde... Eric, un chico nuevo en el pueblo y visiblemente problemático que ha despertado todo su interés. (Y cuando digo todo su interés, recalco la palabra TODO). Ambos personajes acaban completamente enamorados el uno del otro a primera vista, he incluso cabe mencionar que a poco de comenzar la trama, acaban juntos, un hecho que definitivamente no deja lugar al desarrollo de la "relación" entre ambos sino directamente pasamos a los "problemas" derivados de un triángulo amoroso con Gabriel, un booktuber mexicano del cuál Emma es fan y que pondrá contra las cuerdas la relación de nuestros protagonistas.Por otro lado tenemos a Eric que tampoco se salva de la "quema", un estereotipo más de nuestra sociedad que justifica todos y cada uno de sus malos actos con un "pasado oscuro" (el cuál a mí personalmente no me ha parecido para tanto, la verdad sea dicha). Su actitud para con Emma es muy (pero que MUY) discutible, llegando a rozar las mieles del machismo. Hasta el punto de faltarle el respeto incluso delante de los familiares de ella sin ningún tipo de pudor llamándola "friki y aburrida". Además, incluso cuando se supone que están juntos, éste se dedica a tontear y besarse con otras chicas y... Adivinad qué hace Emma, pues literalmente NADA, ¿por qué? Pues porque es tonta, directamente.
La idea del triángulo amoroso parecía atractiva a primera vista, pero al final se quedó en un mero intento de avivar la trama y a mi humilde juicio, sin éxito alguno. Quizás hubiese sido más interesante un buen desarrollo de los protagonistas, sobre todo por parte de Emma, que le hacía falta un buen baño de madurez. Pues nada oye, ninguna de las dos cosas han acabado ocurriendo.
¿Cosas positivas? Quizás las referencias a booktuber y blogger estén bien, no sobresalientes peros si bastante aceptables. Creo que en ocasiones éstas referencias "sobrecargan" de alguna manera la lectura, pudiendo llegar a aburrir al lector.
En definitiva, "Besos entre líneas" me ha parecido una novela que tenía una muy buena idea inicial pero que finalmente no ha sido todo lo bien ejecutada que debería para ser merecedora de un buen puesto en muchas de nuestras estanterías. Trama plagada de clichés (algo que no es necesariamente malo si lo sabes llevar a buen puerto, idea que aquí no han sabido desempeñar), personajes planos, egocéntricos, egoístas y machistas con escenarios prácticamente inexistentes.
Una de las pocas cosas que se salvan, es la pluma de las autoras que pese a tener algún que otro fallo, me han resultado bastante ágiles y dinámicas de leer haciendo que "Besos entre líneas" sea un libro entretenido, fácil y rápido de leer, sin más.
¡Hola! Todas las reseñas que he leído de este libro han sido negativas. Desde luego, juzgando por lo que dices, no merece la pena así que lo dejaré pasar. Una lástima que no te haya gustado. ¡Muchas gracias por tu reseña!
ResponderEliminarNos vemos entre páginas
La vida de mi silencio